chatGPTZurich está investigando aplicaciones de inteligencia artificial (IA) como la extracción de datos de descripciones de siniestros y otros documentos con el objetivo de mejorar la productividad. En concreto, la aseguradora está probando cómo puede utilizar la tecnología de inteligencia artificial ChatGPT en áreas como los siniestros y la modelización, en respuesta al desafío planteado por las startups y rivales de mayor envergadura, como la china Ping An.

Se trata del último ejemplo de empresas consolidadas, desde el bufete de abogados Allen & Overy hasta el editor de periódicos Reach, que experimentan con esta tecnología. Ericson Chan, que en 2020 dejó Ping An para ocupar el cargo de director de información y digital de Zurich, declaró al Financial Times que la IA podría generar “una enorme eficiencia” en tareas como la extracción de información de documentos extensos y la escritura de código para modelos estadísticos. “No va a sustituir a un desarrollador, es un copiloto. Del mismo modo, para la suscripción, para los siniestros, no va a sustituir [a las personas], pero va a hacerlo mucho más eficiente”.

Nuevas aplicaciones tecnológicas

Zurich está investigando apps tecnológicas, como la extracción de datos de descripciones de siniestros y otros documentos. Está introduciendo los datos de los seis últimos años de siniestros en un intento de identificar la causa específica del siniestro en toda una sección de siniestros, con el objetivo de mejorar su suscripción. Bajo la dirección de Chan, la aseguradora también ha creado un nuevo programa de patentes para proteger su propiedad intelectual, centrándose en áreas como la inspección automatizada de riesgos y los sistemas de IA para procesar facturas.

Chan dijo que Zurich está “muy, muy abierta” respecto al uso de herramientas de IA como el reconocimiento facial, pero que no utilizaba tecnología de microexpresión (lenguaje no verbal) y advirtió del peligro de centrarse sólo en los “escollos” de la IA. “Hay muchas áreas en las que hay muchos beneficios”, añadió.